Declaración de Coalición de Naciones y Organizaciones Indígenas a la 49ª Sesión de la Asamblea General de la OEA
- por Soporte
• Por: Luis Fernando Arias Arias - Consejero Mayor ONIC.
Honorable Secretario General de la O.E.A. Luis Almagro, distinguidos Embajadores ante la O.E.A. y líderes y representantes de gobiernos indígenas de las Américas:
Mi nombre es Luis Fernando Arias. Yo soy un indígena Kankuamo de Colombia y el Consejero Mayor de la Organización Nacional Indígena de Colombia (O.N.I.C). El día de hoy, me dirijo a Ustedes en representación de la Coalición de Naciones y Organizaciones Indígenas y les agradezco por la oportunidad de presentarles nuestras preocupaciones.
Para los Pueblos Indígenas del Hemisferio Occidental, es imperativo que esta organización cumpla plenamente con la Resolución AG/RES. 2913 (XLVII-O/17) de la Asamblea General, en virtud de la cual se aprobó el Plan de Acción en 2017. El Plan de Acción delinea medidas que la O.E.A., en su calidad de organización intergubernamental regional, debe adoptar dentro de un período de cuatro años, a efectos de afirmar, honrar e implementar los derechos de los Pueblos Indígenas, tal como están establecidos en la Declaración Americana sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de 2016.
Desafortunadamente, la O.E.A. no está cumpliéndolo en el debido tiempo. Dos años han pasado desde la adopción del Plan de Acción y esta organización ha fallado en iniciar discusiones en torno al mecanismo dedicado a monitorear la implementación de la Declaración por sus Estados Miembros. El plazo para implementar el Plan de Acción se está acercando rápido y el ritmo actual de implementación no está prestando atención a esta urgencia.
El mecanismo de monitoreo es una de las medidas institucionales más importantes que el Plan de Acción llama a nivel hemisférico. A pesar de eso, la O.E.A. no ha celebrado consulta alguna con los Estados Miembros y los Pueblos Indígenas sobre esta crítica medida. Discusiones constructivas e investigación sobre el eventual mandato, membrecía y costos financieros del mecanismo son necesarias, a efectos de asegurar su sostenibilidad financiera y que complemente el trabajo de órganos y mecanismos relevantes de la O.E.A.
Nosotros proponemos que esta organización adopte las siguientes dos acciones para cumplir con el Plan de Acción en el debido tiempo. Primero, la O.E.A. debe celebrar una consulta de alto nivel, de dos días de duración, con los Pueblos Indígenas sobre el Plan de Acción, especialmente sobre el mecanismo de monitoreo e implementación. Esta es una acción inmediata, a corto plazo, que es crucial para alcanzar el necesario consenso y colaboración entre los Pueblos Indígenas y los Estados Miembros sobre la implementación del Plan de Acción. En este sentido, urgimos a la O.E.A. y a sus Estados Miembros a utilizar la próxima Semana Interamericana para los Pueblos Indígenas para celebrar la consulta de dos días sobre el mecanismo de monitoreo e implementación además de celebrar los idiomas y las culturas indígenas.
Segundo, la O.E.A. debe establecer un nuevo status para la participación permanente y más apropiada de los Gobiernos Indígenas en las actividades de la O.E.A. Esta organización debe institucionalizar la participación permanente de los Pueblos Indígenas representados por sus propias instituciones de toma de decisiones. Dos de las más importantes provisiones de la Declaración, Artículos 3 y 4, reconocen el derecho a la libre determinación y al auto gobierno de los Pueblos Indígenas. Las actuales reglas de participación de esta organización llamando a la participación de los Pueblos Indígenas como Organizaciones de la Sociedad Civil no satisfacen estos estándares.
Como resultado, los Gobiernos Indígenas no pueden involucrarse directamente como tales con la O.E.A., los Estados Miembros y otros actores regionales. Los Pueblos Indígenas no deberían ser asimilados a las Organizaciones de la Sociedad Civil. En su carácter de entidades legales y políticas totalmente distintas a la Sociedad Civil en general, los Pueblos Indígenas de las Américas deben contar con su propia representación específica dentro de la O.E.A. Actualmente, las Naciones Unidas está discutiendo los cambios a realizar en sus reglas de participación para permitir la adecuada participación de los Gobiernos Indígenas en las actividades de la organización.
Finalmente, somos consientes del hecho que mientras hoy hablamos aquí, la supervivencia física y cultural de los Pueblos Indígenas está siendo amenazada a lo largo del Hemisferio Occidental. En forma intencionada, los Estados están fallando en proveer seguridad jurídica sobre las tierras colectivas indígenas, especialmente a lo largo de la selva amazónica. Los Estados han incurrido en retrasos injustificados y han recurrido a medidas regresivas para minar los procedimientos de titulación de tierras y congelar la titulación de las tierras indígenas. Los líderes de las comunidades protegiendo sus tierras de invasores intereses empresariales están siendo criminalizados y; en algunos casos, asesinados con total impunidad. La seguridad jurídica sobre las tierras colectivas indígenas es fundamental para garantizar la supervivencia de los Pueblos Indígenas.
Para concluir, si yace aún numerosos problemas sin resolver en el Hemisferio Occidental, tenemos una oportunidad única ante nosotros. Este es el momento para que esta organización adopte acciones institucionales cohesivas y concretas para crear el mecanismo de monitoreo de implementación de la Declaración y asegure la participación permanente de los Gobiernos Indígenas en la O.E.A. Los Pueblos Indígenas son pueblos distintivos, jurídica e históricamente, cuyos derechos deben ser honrados tal como se acordó en el Plan de Acción.
Esperamos seguir discutiendo cómo podemos trabajar juntos para lograr la implementación plena y adecuada de la Declaración y el Plan de Acción de una manera enérgica, sostenida y más inclusiva.
• Adjuntamos Plan de Acción sobre la Declaración Americana sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas: Plan_ Acción_Pueblos_Indígenas
¡Nunca más Abya Yala sin los Pueblos Indígenas!