Pronunciamiento frente al anunciado Paro Armado Las comunidades nos declaramos en Minga de Resistencia.
Las 22 autoridades indígenas ancestrales y los 7 Thu’thenas we’sx que componen la Asociación de Cabildos Indígenas Cxhab Wala Kiwe - ACIN en representación de los planes de vida comunitarios, rechazamos la realización del anunciado paro armado, que no tiene ninguna justificación aceptable en el marco de la dignidad y el derecho propio y que trae de vuelta las dinámicas del conflicto a nuestros territorios.
Esta situación es propiciada por la negligencia y beligerancia del mismo gobierno nacional y sus sectores políticos afines, quienes son los responsable del incumplimiento del acuerdo de paz, en especial el capítulo étnico, los embates contra la JEP, la negación de las 16 curules para la circunscripción especial de víctimas, así como la respuesta insuficiente a los más de 800 líderes sociales y los 150 ex combatientes asesinados.
De igual manera condenamos el accionar de los grupos armados en sus diferentes denominaciones (Disidencias, ELN, nueva Marquetalia, AGC, CDS, etc) que han decidido continuar con la guerra, pues no aceptamos que ella sea el resultado mecánico del incumplimiento del estado, sino más bien una decisión política – económica, ligada al narcotráfico y la cual dista mucho de los ideales que dicen promulgar, en un contexto en que declaran objetivo militar a nuestros guardias, autoridades o todo aquel que porte nuestros símbolos y emblemas.
Como dicen nuestros mayores, el gobierno y la guerrilla patinan y patinan hundiéndose en el mismo barro. Por lo que rechazamos rotundamente a los actores en armas y les exigimos parar de una vez por todas los asesinatos, las amenazas e intimidaciones; pues toda guerra tiene límites y seguimos siendo los de abajo las víctimas de unos y de otros, donde los verdaderos privilegiados del actual modelo neoliberal, les conviene la inestabilidad y la violencia en las zonas donde existen mejores niveles político-organizativos, de resistencia y reclamo, como la nuestra.
Frente a este paro armado anunciamos que las guardias indígenas en ningún momento tomarán acciones que puedan aumentar los riesgos, pues son cuidadores del territorio y orientadoras de la comunidad en situaciones de emergencia. Las guardias indígenas nunca coordinarán con la fuerza pública, ni mucho menos ocuparán el papel que solo le corresponde a las fuerzas militares en el marco de sus competencias constitucionales.
Anunciamos que como autoridades legítimas y como organización indígena NO nos dejaremos amedrentar por los actores en armas, por lo tanto no suspenderemos ninguna de las actividades comunitarias programadas. No obstante consideramos importante ajustar los horarios y los lugares de tal forma que se puedan disminuir los posibles riesgos ante cualquier eventualidad, así como instamos a la comunidad a abstenerse de transitar en zonas de alta peligrosidad como las ya identificadas en cada territorio.
Declaramos el estado de Minga en resistencia, alerta permanente y la puesta en marcha de los planes de contingencia con que cuenta la organización en cabeza de las autoridades, coordinadores locales y zonales, fortaleciendo los puntos de control territorial y convocando recorridos con la comunidad, con el fin de salvaguardar la vida y minimizar los daños.
Responsabilizamos y exigimos nuevamente al gobierno nacional a que cumpla con lo pactado, en especial el capítulo étnico, que hace parte del bloque de constitucionalidad; así como a brindar las garantías para el derecho vida, según le corresponde; y convocamos al ministerio público, las organizaciones de derechos humanos de nivel nacional e internacional, así como a los pueblos hermanos de todo el mundo a visibilizar nuestro proceso de lucha organizativa, política y social pacífica, atentos frente a las afectaciones que pueda sufrir el pueblo nasa del norte del cauca y demás sectores sociales de Colombia, en lo que dura el mencionado paro armado.
“Cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”
“Cxha Cxha cxha cxha, Fuerza fuerza compañeros”