Declaración del Encuentro de Sabios desde el Corazón de la Madre Tierra a sanar, es tiempo de volver al Origen

por Soporte

• Desde Chinchaysuyu – EcoAldea Atlántida
• En #MingaParaSanar, #ConLasVictimasPorLaPaz

El nuevo amanecer nos anuncia que la esperanza, el Buen Vivir, la Paz y la armonía están en este momento en el retorno, en el espiral de la Vida… es uno de los apartes del llamado desde el corazón de los Pueblos Originarios a los hermanos y hermanas del Mundo, hacia la sanación y reconexión con el cordón umbilical de La Madre Tierra.

Llamado perenne que revitalizan día y noche los Pueblos Originarios del mundo, por la sanación de la Madre Tierra, y con ello de cada uno de las venas (ríos), matriz (lagunas), paramos, ojos de agua, selvas, desiertos, mares, océanos, piedras…es tiempo de sanar en #MingaParaSanar.

Ante la necesidad de reencontrarse para seguir tejiendo este propósito, en marzo pasado se llevó a cabo un Encuentro de Mayor@s Indígenas del Abya Yala realizado en el Chinchaysuyu – EcoAldea Atlántida - en Cajibio Cauca, cuya declaración compartimos.

LLAMADO DESDE EL CORAZÓN DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS A LOS HERMANOS Y HERMANAS DEL MUNDO, PARA LA SANACIÓN Y RECONEXIÓN CON EL CORDÓN UMBILICAL DE LA MADRE TIERRA

Representantes de los pueblos y naciones originarias de América del Sur, Centro y Norte, la India y Japón, nos encontramos respondiendo al llamado de la Madre Tierra (PACHAMAMA). Sentimos como sus hijas e hijos el dolor que vive y por ello, tenemos la responsabilidad de actuar para su protección y su sanación, incluyendo la de la humanidad.

Alrededor del fuego sagrado, durante días y noches, compartimos la memoria de nuestros orígenes, cuando vivíamos en paz, en unidad, en armonía entre los pueblos y con el Universo.

Alrededor del fuego sagrado compartimos las resistencias y los dolores de siglos de esclavitud, colonización, invasiones y violencias, que bañaron con sangre y lágrimas a nuestros territorios y que interrumpieron el orden natural. Todo esto fue resultado de un paradigma centrado en el individualismo exacerbado y en una visión fragmentada de la vida. A pesar de estas circunstancias no perdimos nuestra conexión ancestral; y con el tiempo la resistencia de nuestros pueblos ha venido creciendo más fuerte. Los pueblos ancestrales han vivido de acuerdo a los pilares de la espiritualidad, reciprocidad y una visión integral, viviendo en armonía con los ciclos de espacio y tiempo.

Está claro que hoy nuestra Madre Tierra sufre graves destrucciones de los ríos, lagos, mares y las fuentes esenciales de la vida (los cuatro elementos), poniendo en riesgo la existencia de todos y toda la vida en el planeta. La causa de todo esto es el sistema económico, político y cultural, guiado por la codicia y la avaricia.

Las enfermedades espirituales manifestadas en forma de minería extractiva, los monocultivos basados en las agroindustrias, el tráfico de drogas, hidroeléctricas, la guerra y el conflicto, los dogmatismos y fanatismos, desarmonizan y generan desequilibrio. Todo esto nos convoca a retornar al origen, a la raíz, a nuestros sitios sagrados, y a los gobiernos originales los cuales estaban basados en el Gran Consejo representativo de los cuatro puntos cardinales (Norte, Sur, Oriente y Occidente).

En consecuencia, nosotros como representantes acordamos restablecer el Consejo de Naciones y Pueblos Originarios del Mundo, el legado de nuestros ancestros, como una instancia guía para nuestros gobiernos propios. El Consejo deberá ser conformado por los abuelos y abuelas sabios espirituales, líderes de las organizaciones de los pueblos originarios y líderes de las cuatro direcciones.

La palabra puesta por los representantes orienta este Consejo para ayudar a sanarnos y sanar a la Madre Tierra, para preservar y trasmitir la sabiduría ancestral a las presentes y futuras generaciones. El Consejo de Naciones y Pueblos Originarios del Mundo tiene el propósito de conducir a la humanidad de regreso al Buen vivir (Sumaq kawsay).

En este camino nos comprometemos a: tejer los nudos que atan y articulan lo local con lo global, a revitalizar los centros de pensamiento y conocimiento ancestral, los centros de acción y conocimiento de las mujeres; también a revitalizar la comunicación ancestral, la música, los cantos, las danzas, los rituales y ceremonias sagradas de los pueblos, las fiestas ceremoniales lunares y solares y la recuperación y purificación de los sitios sagrados. Nos comprometemos a trabajar con fuentes de energías limpias para restablecer al equilibrio y restaurar el orden natural.

Este es un llamado desde nuestro corazón al corazón de todos los que compartan esta conciencia colectiva de cuidar y proteger nuestra gran casa. Hacemos un llamado:

1. A las organizaciones sociales y políticas: para que escuchen este mensaje y reflexionen que la sabiduría de nuestros pueblos ancestrales es la solución para curar la enfermedad que experimenta nuestra Madre Tierra.

2. A los gobiernos: para que reconozcan y valoren la sabiduría, conocimiento, ciencia y autoridad espiritual ancestral que han mantenido la integridad de los territorios indígenas.

3. A las Naciones Unidas: para que apoyen la aprobación de los derechos de la Madre Tierra.

El nuevo amanecer nos anuncia que la esperanza, la felicidad, la paz y la armonía están en este momento en el retorno, en el espiral de la vida.

Convocamos a todos los Pueblos Originarios a hacer la traducción de este documento en sus lenguas propias.

CHINCHAYSUYU CAJIBIO (ECOALDEA ATLÁNTIDA), CAUCA, COLOMBIA, 9 DE MARZO DE 5527 (2019).

Por ello, #ConLasVictimasPorLaPaz varios escenarios se llevarán a cabo en Bogotá y en el país, hoy 9 de abril Día de la Conmemoración de las Victimas por el conflicto armando, cuya causa con sus consecuencias sigue vigente, al recrudecerse en tiempo de acuerdo final de Paz en Colombia, por lo que Las Victimas deben seguir siendo la priorización en la implementación de dicho acuerdo, y con ello el plan marco del capítulo étnico.

Cronograma9Abril